Al menos 47 camiones, maquinaria pesada y una motoniveladora fueron destruidos en un ataque incendiario en las obras de la central hidroeléctrica de Rucalhue, en La Araucanía chilena. Cinco encapuchados armados golpearon a dos guardias de seguridad antes de prender fuego a los equipos. La empresa Rucalhue Energía denunció el hecho y lo calificó como un atentado contra la infraestructura, los trabajadores y el Estado de derecho.
El Gobierno chileno anunció que se querellará por Ley Antiterrorista y el presidente Gabriel Boric condenó el hecho, asegurando que los responsables serán llevados ante la justicia. La oposición también criticó la violencia y pidió mayor acción del Estado, cuestionando el rol del Ejército y la Armada.
“El atentado en la central Rucalhue en Alto BioBio merece toda nuestra condena. Tal como lo hemos hecho en otros casos, perseguiremos y encontraremos a los responsables que deberán responder ante la justicia. Seguiremos trabajando sin dar pie atrás para erradicar toda forma de violencia”, aseguró el presidente chileno, Gabriel Boric, en un mensaje publicado en su cuenta en X.
El ataque ocurre en el marco del conflicto histórico entre el Estado, comunidades mapuche y empresas forestales en el sur de Chile. Desde 2022, rige un estado de excepción que permite el despliegue militar para apoyar a Carabineros en el control del orden público en la zona.
Vía: Infobae
Foto: Cooperativa.cl
