Un médico denunció penalmente a su colega y propietario de una clínica privada ubicada en inmediaciones del Cine Center, por presunta estafa. El motivo: el inmueble arrendado se encuentra bajo investigación de la Fiscalía debido a la muerte de una paciente brasileña durante una cirugía estética.
Los arrendatarios informaron que firmaron el contrato de alquiler en agosto y comenzaron a operar en el lugar desde el 1 de septiembre, sin saber que una de las áreas de la clínica estaba precintada por orden policial. Aseguran que el dueño del inmueble, identificado como Carlos T., nunca les informó sobre la investigación en curso ni sobre la presencia del precinto, el cual habría sido retirado sin autorización fiscal.
El representante de los afectados declaró al diario Clave300 que, hace dos semanas, efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) se presentaron en la clínica para verificar el ambiente precintado y constataron que el sello había sido removido sin orden judicial, elevando el caso nuevamente a conocimiento del Ministerio Público.
«Si él sabía que la clínica estaba siendo investigada, ¿por qué la alquiló? Esto me genera un gran perjuicio, ya que debo pagar médicos, personal, proveedores y otros servicios. Cuando reclamé, el dueño me trató de la peor manera y me conminó a abandonar los ambientes», denunció el profesional afectado.
Los representantes del equipo médico afectado presentaron una denuncia penal contra el propietario por el presunto delito de estafa, argumentando que no pueden reabrir la clínica mientras dure la investigación, y que el capital invertido —que oscila entre Bs 250.000 y Bs 300.000— está en riesgo de perderse completamente.
