El presidente Luis Arce aseguró que la izquierda no está muerta en Bolivia y que, por el contrario, debe unificarse para enfrentar las políticas neoliberales y defender los recursos naturales del país.
“La izquierda no está muerta en el país. Tarde o temprano va a resurgir la necesidad de implementar nuestro modelo económico, porque no auguro éxito bajo políticas neoliberales”, afirmó Arce en una entrevista con la agencia de noticias rusa Sputnik.
El mandatario remarcó la necesidad de unificar a la izquierda en un solo bloque, y consideró un error que en las últimas elecciones se hayan presentado muchos partidos atomizados.
“Ahora tenemos que unificarnos en un solo bloque, en un solo frente, para poder justamente enfrentar a la derecha que va a tomar medidas en contra del pueblo boliviano y de nuestros recursos naturales. Hay que empezar ya a construir ese bloque”, enfatizó.
En la entrevista, Arce advirtió que existen intereses extranjeros en las riquezas naturales de Bolivia, como el litio, las tierras raras y otros minerales, “prácticamente toda la materia prima que necesita un país desarrollado para no perder esta guerra económica internacional por la hegemonía mundial”.
Asimismo, recordó que su Gobierno sufrió un “boicot” de la oposición y de Evo Morales, lo que —según afirmó— derivó en la crisis económica y llevó al electorado a inclinarse por la propuesta de Rodrigo Paz, del Partido Demócrata Cristiano (PDC).
“Es un sentimiento de que todo nuestro trabajo de tantos años por el pueblo hoy está en riesgo. Esto se debe fundamentalmente a la ambición de Evo Morales (2006–2019) de volver a ser presidente.Él empezó a desgastar nuestro Gobierno, sabiendo que era un Gobierno de izquierda, que iba a dar continuidad a políticas sociales”, sostuvo Arce.
Morales no puede postularse a un cuarto mandato presidencial, ya que ningún ciudadano puede acceder a más de dos presidencias, recordó. Según Arce, los legisladores de Morales en la Asamblea se aliaron con la oposición tradicional para trabar la aprobación de leyes, especialmente de créditos internacionales que habrían contribuido a mitigar la crisis económica.
En los últimos días, el Legislativo aprobó varios de esos créditos, que se ejecutarán durante el próximo Gobierno. “Están aprobando en dos semanas lo que no hicieron en cinco años”, observó el mandatario.
“Esto ratifica el boicot. No es que los créditos estaban mal hechos, no es que no teníamos capacidad de pagar, no es que nos estábamos sobreendeudando y otras justificaciones que decían. Sencillamente, no querían que nosotros resolviéramos los problemas de la sociedad y querían asfixiarnos económicamente. Solamente han hecho sufrir a la población, como en los años del neoliberalismo”, remarcó.
















