El presidente Luis Arce responsabilizó al exmandatario Evo Morales por la reciente suspensión de Bolivia del bloque regional del Alba-TCP, luego de que la organización calificara al nuevo gobierno de “antibolivariano, antilatinoamericano, proimperialista y colonialista”.
“Resulta irónico e imperdonable que el exmandatario se dedicara en la primera vuelta a atacar a los candidatos que representaban las alternativas populares…, desplegando activas y militantes campañas por el voto nulo y enorgulleciéndose de sus resultados; pero que en la segunda vuelta no solo no llamara a votar nulo, sino que convenciera a los suyos de apoyar a la derecha”, señaló el mandatario a través de sus redes sociales.
El mandatario añadió que “ahora esta facción política y su jefe político —en alusión a Morales— debe hacerse cargo de la estrategia enemiga” y advirtió que “¡la historia no lo perdonará en su ceguera, revanchismo e inagotable sed venganza!”.
Las declaraciones del presidente surgen después de que la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (Alba-TCP) comunicara su decisión de suspender al gobierno entrante de Bolivia de ese bloque regional.
Arce sostuvo que el impacto de la noticia “en la oligarquía y burguesía locales” se reflejó en las palabras de sus “voceros de siempre”, quienes, dijo, “se regocijaron del aislamiento del país del concierto de los pueblos de la región”.
También calificó como “lamentables y sumisas” las declaraciones del presidente electo Rodrigo Paz al referirse a los Estados Unidos, a la administración de Donald Trump, y a la dirigente opositora venezolana María Corina Machado, a quien Arce llamó “mal acreedora del Nobel de la Paz”.
“No esperábamos y tampoco esperamos que puedan actuar de distinta manera: la derecha es siempre derecha, sea cual sea el ropaje con que se vista: dictatorial o ‘demócrata’”, afirmó. El mandatario explico que, por esas razones, el Gobierno, el Movimiento Al Socialismo (MAS) y los movimientos sociales se distanciaron “completamente” de la posición de Morales y de su partido Evo Pueblo.
Recordó que el expresidente reconoció, el 20 de octubre, que “Paz y Lara ganaron con el voto evista, el voto de los indignados por la proscripción y exclusión electoral. El 1.3 millones del voto nulo definió la segunda vuelta”.
“Es cierto que los números no mienten: los sectores evistas efectivamente apoyaron a esa fracción reaccionaria que hoy arremete contra los hermanos gobiernos y pueblos de Venezuela, Cuba y Nicaragua, y en general toda experiencia de izquierda”, afirmó Arce.
El presidente expresó su comprensión y respaldo a la decisión del Alba-TCP, agradeciendo las décadas de apoyo del bloque en “la mejora de la vida de las familias bolivianas en los ámbitos educativo, cultural, sanitario, deportivo, económico y científico”.
“Esa gloriosa y noble página de integración latinoamericana y caribeña de la que fuimos parte no será en vano; más temprano que tarde marcharemos todos unidos. Por lo demás, ratificamos nuestra firme convicción revolucionaria con el Alba y con la lucha de los pueblos”, manifestó Arce.
