La construcción, financiada íntegramente por Brasil con una inversión cercana a los 80 millones de dólares, se espera que se complete en un plazo de alrededor de tres años. El puente tendrá una longitud superior a 1.200 metros.
Representantes de Cadexnor señalaron que este puente no solo materializa un compromiso histórico, sino que transformará la dinámica económica de la región amazónica.
La obra promete fortalecer el comercio exterior entre Brasil, Bolivia, y Perú; minimizar los costos y tiempos de logística para las exportaciones e importaciones bolivianas hacia el Atlántico, e impulsar el desarrollo y la fraternidad entre los pueblos fronterizos.
El senador Confúcio Moura, promotor del evento en la Universidad Federal de Rondônia (UNIR), afirmó que la iniciativa simboliza la integración y la voluntad de los presidentes Luis Arce y Luiz Inácio Lula da Silva de construir «puentes en lugar de muros», promoviendo la integración física y económica entre las naciones.
El encuentro reunió a autoridades brasileñas y bolivianas, empresarios y expertos, quienes analizaron a fondo los impactos económicos, sociales y estructurales de esta conexión clave para la región amazónica fronteriza.
Más de un siglo
El puente binacional tendrá una extensión de más de 1.200 metros y su construcción tomará cerca de tres años. Garantizará la navegabilidad en el río Mamoré.
En Porto Velho, Brasil, el 8 de agosto de este año y después de 122 años de firmado el Tratado de Petrópolis y las notas reversales de 1971, los presidentes de Bolivia, Luis Arce, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, fueron testigos de la firma del contrato de construcción del puente sobre el río Mamoré..
“Para Bolivia, estas obras constituyen un homenaje a nuestro Bicentenario”, expresó Arce, invitado especial del presidente Lula da Silva al acto realizado en Porto Velho y que materializa un acuerdo firmado hace más de un siglo.Este proyecto de conexión entre Bolivia y Brasil, a través del puente internacional, data de 1903 con el Tratado de Petropolis y las notas reversales en 1971.
El artículo 7 del tratado obliga a Brasil, por ejemplo, a “construir en territorio brasileño, por sí o por empresa particular, un ferrocarril desde el puerto de San Antonio, en el río Madera, hasta Guayaramerin, en el Mamoré, con un ramal que, pasando por Villa Murtinho u otro punto próximo (Estado de Mattogrosso) llegue a Villa Bella (Bolivia), en la confluencia del Beni con el Mamoré”.
















