El comandante de la Policía en Yapacaní, coronel Leonardo Efraín Gutiérrez Moscoso, aclaró sobre un hecho violento ocurrido el pasado 1 de mayo en la comunidad Ayacucho, donde Felipe Torrico, de 47 años, fue aprehendido tras disparar contra su yerno y llevarse por la fuerza a su hija, Liset Mamani Torrico, no fue rapto ni secuestro sino un lío familiar.
Según el informe policial, el acusado utilizó un arma de fuego de fabricación casera para amenazar a Jesús Borda Velásquez, pareja de su hija, de 22 años, aparentemente por oponerse a la relación. En medio del conflicto, obligó a su hija a acompañarlo y, ante el temor de una tragedia, la joven pidió a su pareja que abandonara el lugar.
En su huida, el yerno alertó a las autoridades señalando que su esposa había sido raptada por un hombre armado. La Policía activó un operativo y logró interceptar el vehículo en el que Felipe se dirigía hacia Yapacaní, encontrando a la mujer a bordo del motorizado.
Aunque se descartó que se tratara de un secuestro como tal, el Ministerio Público imputó a Felipe Torrico por el delito de homicidio en grado de tentativa. Un juez cautelar ordenó su detención preventiva por 30 días en la carceleta de Portachuelo.
