El vicepresidente electo, Edmand Lara, aseguró que Bolivia no necesita de la DEA si se lleva adelante una reestructuración profunda de la Policía Boliviana, y advirtió que ninguna organización internacional puede actuar en el país cargándose a cuanto boliviano considere narcotraficante.
El también exoficial de la Policía reavivó la polémica sobre la posible presencia de la agencia antidrogas estadounidense, tras las declaraciones del presidente electo Rodrigo Paz, quien expresó su disposición a cooperar con todos los organismos internacionales, incluida la DEA.
Lara reconoció que el tema generó controversia, pero coincidió con Paz en que “la DEA nunca se fue de Bolivia”, al sostener que la agencia opera mediante agentes infiltrados en lugares estratégicos. Recordó como ejemplo el caso del exjefe antidrogas Maximiliano Dávila, condenado en Estados Unidos por narcotráfico, tras una investigación en la que —según dijo— participaron agentes encubiertos de la DEA.
El vicepresidente electo aclaró que, aunque no existe una oficina visible de la DEA en territorio boliviano, “siempre ha estado presente”. Sin embargo, insistió en que la prioridad del nuevo gobierno debe ser una reestructuración profunda de la Policía Boliviana, para que el país no dependa de fuerzas extranjeras.
Lara explicó que otra cosa es que no haya una oficina visible, que la gente conozca donde la DEA tenga su personal trabajando, donde tenga su logística, sus vehículos, sus oficinas; no hay. “Pero la DEA siempre ha estado en Bolivia. Particularmente yo, como exmiembro de la Policía Boliviana, considero que es importante, ojo con esto que para mí es importante: primero reestructurar la Policía Boliviana. La Policía reestructurada en Bolivia no necesita de la DEA, no necesita de otras policías del mundo para combatir el narcotráfico”, afirmó en un video colocado en sus redes sociales.
“Pero bueno, yo respeto la forma de pensar Rodrigo Paz, “pero quiero decirles algo bien importante a todos los bolivianos: la soberanía del pueblo boliviano se debe respetar. Ninguna organización internacional con el pretexto de combatir el narcotráfico puede meterse en nuestra soberanía. Nosotros somos independientes. Agradecemos, sí, a las organizaciones internacionales que quieran cooperar con formación, con capacitación con equipamiento, pero no pueden interferir en nuestra soberanía, tampoco pueden venir a maltratar a la gente vulnerando sus derechos al debido proceso a la presunción de inocencia y no pueden venir tampoco a Bolivia a cargarse a diestra y siniestra a cuanto boliviano les considere narcotraficante. No pueden hacer eso”, afirmó.
Dijo que reconoce y valora a los agentes de la DEA, pero es importante también dejar en claro que la soberanía nacional se debe respetar. “Yo tengo la solución para desestructurar la Policía y combatir la corrupción desde el interior de la Policía y me he arriesgado incluso quedarme sin un cargo por denigrar la corrupción”, manifestó.
También planteó reestructurar la justicia que -según él- está muy mal vista y mal administrada y que tiene la solución también para devolverle la justicia a todos los bolivianos, “pero una golondrina no hace verano, yo necesito que todos los bolivianos se unan, que se acaben las diferencias, que se acabe la división. Es momento de escribir una nueva historia entre todos los bolivianos”, declaró.















