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Tragedia en ritual tribal: 39 jóvenes mueren durante ceremonias de circuncisión en Sudáfrica

Una ceremonia de iniciación tribal, en la que los adolescentes de Sudáfrica se someten a una circuncisión agonizante y sin atención médica, ha llegado a su fin con 39 muertes y decenas de otros niños mutilados.

A pesar del objetivo del gobierno de cero muertes este año, el número aún representa una caída significativa con respecto al año pasado, cuando murieron 93, según el Daily Mail. En los últimos cinco años, 361 niños han muerto en la práctica rudimentaria.

La ceremonia, conocida como Ulwaluko, suele ser realizada por el pueblo xhosa y marca la transición de la infancia a la edad adulta.Los niños suelen pasar por el ritual entre los 16 y los 26 años.

Horribles complicaciones el año pasado llevaron a 11 amputaciones de pene, después de que «cirujanos» tradicionales no calificados usaran lanzas y antiguas hojas de afeitar para realizar los impresionantes rituales.

Miles más han sido hospitalizados desde 2020 después de los períodos de inicio bianuales de tres meses que terminan con la circuncisión. Si no participan en la ceremonia, no se les permite asistir a reuniones tribales, participar en actividades sociales o incluso casarse.

Los rituales se han realizado durante siglos en secreto, en chozas especialmente construidas, lejos de las aldeas, donde nadie excepto los ancianos tribales y los jóvenes iniciados pueden entrar.

El gobierno culpa a las bandas criminales que han establecido cientos de escuelas de iniciación ilegales y no reguladas, con «médicos» no capacitados que cometen errores graves en las circuncisiones. No hay una higiene adecuada durante los procedimientos y faltan suministros médicos para atender a los jóvenes que tienen problemas después de la circuncisión. La gangrena, la sepsis y la deshidratación son las principales causas de muerte, aunque hay informes de que los niños que se retiraron del procedimiento terminaron siendo apuñalados, ahogados o golpeados hasta la muerte.

Los grupos criminales que operan en la región ignoran la ley que prohíbe la participación de niños menores de 16 años en el ritual y cobran a las familias altos precios por realizar Ulwaluko, a menudo con resultados fatales u horribles.

Fuente: Extra.Globo