Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) tras cuatro días de arduos trabajos logró reparar el oleoducto que quedó afectado por los deslizamientos e inundaciones que ocurrieron en Samaipata, Santa Cruz.
De esta manera, la subsidiaria YPFB Transporte informó que logró controlar la fuga de gas y que la situación se encuentra bajo control.
“Posteriormente la reparación del oleoducto OSSA 1 finalizo a las 04.00 horas del día viernes. Este suceso, que afecto la operación de transporte de gas licuado y presentaba un potencial de riesgo significativo, fue abordado con la máxima rigurosidad y profesionalismo”, indicó la petrolera estatal en un comunicado.
La situación generó el pánico en la población de Samaipata, que ya había sido golpeada por los fenómenos climáticos y se exponía luego a una fuga de gas. YPFB destacó el accionar de las autoridades locales y de sus funcionarios, que lograron evitar riesgos para la vida y el medio ambiente.
“La capacidad operativa de nuestros equipos especializados y el apoyo coordinado de autoridades locales, vecinos y comunidades, permitió que la situación se mantenga bajo control en todo momento”, se lee en la publicación.
Sin embargo, YPFB reconoció que la tarea fue compleja, pero se espera que la reparación mantenga el oleoducto en un funcionamiento óptimo sin mayores complicaciones.
“Las tareas realizadas incluyeron la contención del área afectada, la reparación de la anomalía presentada, la estabilización del sistema y la implementación de medidas preventivas adicionales para garantizar la integridad del ducto. Todo ello se ejecutó en condiciones geográficas y climatológicas complejas, lo que demandó un esfuerzo adicional y la aplicación de soluciones técnicas avanzadas”, remarcó la petrolera estatal.
La situación en Samaipata se va controlando debido a que las lluvias cesaron y tanto la Gobernación de Santa Cruz como el Gobierno central gestionaron recursos para atender a la población.















